En esta ocasión nuestros planes con niños nos han llevado a Laboral Ciudad de la Cultura, o como todos la conocemos, la Universidad Laboral.
Para ser sinceros, nos decidimos a ir hasta la Universidad Laboral por ir a pasear y asi pasar la mañana del domingo. Suponíamos que los niños se iban a aburrir y que no les gustaría, pero para nuestra sorpresa le pareció una visita muy interesante.
La verdad es que teníamos muchas cosas a favor para que los niños tuviesen inquietudes y nos preguntasen cosas sobre la Laboral, ya que habíamos pasado en multitud de ocasiones por delante y siempre les llamaba mucho la atención, a lo que nosotros contestábamos que algún día les llevaríamos a verla y que subiríamos a la torre.
Podéis imaginaros las caras de asombro cuando les decíamos esto, ya que les parecía que la torre era muy alta y que era imposible subir hasta allá arriba.
Así que nos decidimos y fuimos a pasar la mañana. He de confesar, como os he dicho antes, que nosotros teníamos varias bazas a favor.
La primera era que papa había estudiado allí, así que les iba contando donde había tenido la aulas, donde hacia gimnasia, a donde íbamos al recreo, la cocina, el teatro, la cafetería (aunque aquí no les contamos todo, puesto que “hacer pellas” aun no esta en su vocabulario, y espero que tarden en saber lo que es,jeje…).
Estuvimos paseando por los jardines, vimos la pista de atletismo, de fútbol, las canchas de baloncesto y la piscina (aunque esta estaba muy deteriorada). No sabéis como abrían los ojos cuando les decíamos que nosotros en alguna ocasión, en el recreo bajábamos a la piscina, nos bañábamos y nos volvíamos a clase. No tengo que deciros que los niños nos dijeron que querían estudiar allí.
Visitamos el teatro por dentro y he de reconocer que nos sorprendió como había cambiado, aunque sigue teniendo la esencia de aquella época de estudiantes cuando aún era el salón de actos.
Otra baza a favor del sito, fue que papa y mama se había casado allí, así que fuimos a visitar la iglesia para que la viesen por dentro. Sera por sentimentalismo, pero me parece impresionante, digna de visitar.
A parte de que nosotros estamos muy ligados a la Laboral, para los que no la conocéis como nosotros, os la recomiendo por muchas razones, puesto que es parte de nuestra historia, es un edificio impresionante, tienen talleres, exposiciones , etc…
Para el final dejamos lo mejor, la visita a la torre. No creo que haga falta decir que es impresionante, tanto la torre como las vistas. Antes de subir pasamos a ver las cocinas y los comedores (cuantas veces me habrán hecho la comida esos cacharros), los cuales hoy destinan ha exposiciones.
Creo que los niños se lo han pasado muy bien corriendo de un lado para otro y viendo un montón de cosas chulas. Muy recomendable la visita, os gustará. Un saludo de asturianinos.
